San Silvestres en Madrid: 50.000 corredores gastaron más de un millón de euros

San Silvestre Vallecana 2016. Foto: Facebook San Silvestre Vallecana

Despedir el año corriendo una carrera popular se ha convertido ya en un hábito para muchos madrileños. Cada año que pasa son más los que se ponen las zapatillas el último día del año, aunque muchos lamentablemente no se las volverán a calzar hasta 365 días más tarde. ¿O no?
Durante el pasado mes de diciembre se celebraron en la Comunidad de Madrid 28 carreras bajo la denominación de San Silvestre, aunque sólo 13 de ellas lo hicieron el último día de 2016. Y es que la ola de San Silvestres comenzó el 18 de diciembre en varias localidades como Alcorcón, Aldea del Fresno, Colmenarejo, Griñón y Villanueva de la Cañada hasta culminar con la San Silvestre Vallecana Internacional, la última carrera de este tipo en celebrarse en Madrid.
Estas 28 carreras populares fueron en realidad 37 pruebas, ya que nueve de ellas ofrecían dos distancias. Estos recorridos varían entre los 4 kilómetros de citas como Aldea del Fresno y Torrelaguna hasta los 18 que ofrecía Pedrezuela en su San Silvestre Trail. La superficie igulamente varía, pues aunque predomina el asfalto, también se celebran algunas pruebas de campo a través (cross) y de montaña (trail).
Además, la mayoría de estas citas están pensadas para toda la familia, pues suelen ofrecer carreras infantiles. Alguna incluso, como la San Silvestre de Valdeavero, ofrece actividades para los más pequeños mientras corren sus progenitores. También tienen en general un carácter solidario, pues parte de la inscripción se destina a causas benéficas, con pruebas que suelen recoger alimentos, como la San Silvestre de Vicálvaro, o juguetes, como la San Silvestre de Hortaleza.
Vallecas acapara las inscripciones
El precio medio de estas inscripciones varía de una carrera a otra, aunque normalmente suele oscilar entre los 8 y 12€, aunque también encontramos alguna que otra inscripción gratuita. A cambio de ese importe, el corredor puede encontrar desde pruebas que por 8€ te dan hasta de comer, como ocurre con la San Silvestre de Buitrago, a otras con inscripciones muy elevadas, como la San Silvestre Vallecana, cuyo precio alcanza los 23€. El kilómetro entre el Bernabéu y Vallecas se paga más caro que el kilómetro de la Maratón de Madrid y el corredor no tiene ni avituallamientos intermedios, ni medalla, ni servicio de fisioterapeutas, ni feria del corredor, etc.
Sólo contabilizando el importe de las inscripciones de los corredores que terminaron estas San Silvestres, 49.973 corredores en total, la cifra ronda los 940.000 €. La San Silvestre Vallecana aportó el 66% de los llegados a meta y concentró el 81% del dinero recaudado por inscripciones. Así, el conjunto de los 33.063 corredores que terminaron la Popular e Internacional, sin descontar los corredores invitados que no pasan por caja, pagaron cerca de 760.000 €, a razón de 23€ ó 21€ por cabeza.
Si a esta cifra se le suma el número de corredores inscritos que no se presentaron o no llegaron a meta -la organización habla de 40.000 inscritos- la recaudación sólo por inscripciones se acerca a los 900.000 €. Si a esta cantidad le sumamos los ingresos por patrocinadores y publicidad, el negocio para los organizadores de la prueba vallecana parece rentable, pues hay pocas carreras en España que lleguen a estas cifras.

En el resto de San Silvestres, la suma del importe de las inscripciones de los 16.873 corredores que concluyeron estas pruebas superan los 178.000 €. Tras la San Silvestre Vallecana, las cuatro siguientes carreras en participación son las que más recaudan, curiosamente todas ellas con un precio de inscripción de 12€. Así, aparecen la San Silvestre de Las Rozas (con dos distancias y un total de 2.477 corredores que se dejaron más de 26.000 €), la de Getafe (con 1.656 finisher y casi 20.000 € en inscripciones), la de Alcobendas (con 1.611 llegados a meta y alrededor de 19.300 € recaudados) y la de Alcalá de Henares (con 1.387 corredores que gastaron unos 16.600 €).
Obviamente, a esta cifra hay que restar los gastos de la organización de estas pruebas, que pueden incluir cronometraje, vallado y señalización, baños portátiles, premios en metálico, trofeos y medallas, camisetas y bolsa del corredor, animación, publicidad, logística, seguros, donaciones, sueldos de los trabajadores, etc. De hecho, muchas de estas carreras apenas logran cubrir gastos y prácticamente se cuentan con una mano las que logran obtener importantes beneficios.
El 28% fueron mujeres
Por otra parte, de los 49.973 corredores que participaron en las San Silvestres madrileñas, 14.136 fueron mujeres, lo que equivale al 28% del total. Al margen de la San Silvestre Vallecana, con 9.904 mujeres en meta (32%), el ranking de participación femenina lo encabezan pruebas minoritarias. Así, Griñón (49%), Galapagar (44%), la carrera corta de la San Silvestre de Las Rozas (44%), Valdeavero (43%), el trail corto de Manzanares de El Real (42%), El Boalo (42%) y la prueba corta de Alcorcón (42%) se acercan a la paridad en género.

Mohammed Blal, doblete en San Silvestre
Con tanta San Silvestre repartida en varias semanas, no es de extrañar que algún atleta se haya impuesto en más de una carrera. En 2016, sólo tres corredores lograron repetir victoria. Así, Rodrigo Ares (Madrid, 1976), del Club de Atletismo Run and Run de Guadarrama, se impuso el día 30 en El Boalo y un día después lo hizo en Galapagar, corriendo el doble de distancia y haciéndolo incluso más rápido.
Por su parte, María Soledad Aragunde, del Club Tierra Trágame, necesitó algún día más de diferencia para lograr el triunfo el día 26 en la Otra San Silvestre de Hortaleza y un par de días después conseguirlo en Humanes de Madrid.
Lo que no es menos habitual es la gesta de Mohammed Blal (Oujda, 1982). El atleta de origen marroquí afincado en España se impuso por la mañana en la San Silvestre de Getafe. Hay que recordar que Blal conoce de maravilla las calles de Getafe pues pertenece al Atletismo Artyneon, el club que organiza la Media Maratón de Getafe, una prueba que ganó en 2012 y 2013 y quedó segundo el pasado año. Por la tarde, Blal se desplazó hasta Collado Villalba para imponerse en su San Silvestre, con una distancia menor, pero corriendo ocho segundos más rápido el kilómetro de lo que lo había hecho en Getafe sólo unas horas antes.
Otra de las curiosidades se produjo en la San Silvestre de Galapagar, donde dos hermanos se hicieron con el triunfo. Así, José Alejandro Heras Peña (Huelva, 1989), del Club Sporting de Hortaleza, se hizo con la victoria en la categoría absoluta, mientras que su hermana y compañera de club María Heras Peña (Madrid, 1995) se impuso en la prueba femenina.
Los ganadores más rápidos
En cuanto a los ganadores más rápidos, éstos fueron Nguse Amlosom, en la San Silvestre Vallecana Internacional, que completó los 10 Km a un ritmo de 2:49. Ricardo Serrano Camisón lo hizo a 2:55 en la San Silvestre Mostoleña, mientas que Mohammed Blal corrió a un ritmo de 2:58 en Collado Villalba, similar al de Sergio Salinero -ganador de la Vallecana Popular en 2015- en la prueba corta de la San Silvestre del Jarama. Cayetano Redondo Herreros fue el “ganador más lento”, a un ritmo de 4:22, pero claro su San Silvestre de Pedrezuela era de 18 kilómetros y encima de montaña.
En cuanto a mujeres, Brigid Jepchirchir Kosgei reinó en la San Silvestre Vallecana Internacional a un ritmo de 3:13, seguida de Rehima Serro Hussen, que corrió a 3:23 el kilómetro en la San Silvestre Mostoleña. Lucía Morales García se impuso en Getafe a un ritmo de 3:30, mientras que Cristina Giurcanu ganó en la Vallecana Popular volando a 3:31. Silvia Rodríguez Mateos se impuso en la San Silvestre de Navacerrada a un ritmo de 5:28.
Enhorabuena por el artículo. Muy buenas referencias, comparativas y estadísticas. Espero que todos crezcamos en este entorno deportivo y saludable. Un cordial saludo compañer@s!